También hay espacio para la elegancia. Por un momento pensamos que la ropa formal podría haberse vuelto obsoleta, pero esta temporada el estudio se alegra de traer de vuelta algo de sastrería. Los trajes en telas japonesas e italianas están disponibles en una variedad de estilos, con dos botones, con botonadura simple o cruzada, no más. Pata de gallo y micro cuadros repartidos en chaquetas con cremallera y abrigos con mangas raglán. Este no es un diseño conceptual.
En cambio, Sandro quiere reinventar piezas clásicas del armario masculino, siempre encontrando nuevas variaciones: en el tamaño de un bolsillo, un hombro más redondo o un cuello más pequeño. El gusto por la autenticidad y la atención a los detalles que son siempre útiles y siempre están justificados.
Este es definitivamente un look retro. Directamente de los años 60, un abrigo estilo coche en piel italiana o una camiseta sin mangas tejida a mano en color crudo recuerdan la afición de la marca por lo vintage. Los tejidos de lana y cachemira son suaves. Las chaquetas de aviador y las sobrecamisas de lana mixta están lejos de ser pequeñas con sus generosos y holgados cortes. Los hombros ligeramente caídos brindan comodidad y facilidad.
Este estilo retro proviene del deseo de volver a los guardarropas de nuestra infancia, lo que usamos y lo que vimos usar a nuestros mayores.