Desigual lanza su primera colección de joyería. Se trata de una serie de 57 piezas, con baño en oro de 18 quilates o plata de 1ª ley, que han sido diseñadas por Gala Meyer. Con esta nueva línea, la marca consolida su apuesta por la calidad y los diseños diferentes y audaces, que expresan la personalidad de quien los elige y los lleva.
La colección se comercializará online en desigual.com y en cuatro puntos de venta: las flagship stores de Desigual en Madrid (Preciados, 25) y Barcelona (Plaça Catalunya, 9), en la tienda de la T1 del aeropuerto de Barcelona y en la del Passeig de Mare Nostrum (en los bajos de la sede corporativa, frente al mar).
Las piezas, diseñadas desde una perspectiva agender, apelan a personas que quieran demostrar su singularidad, tanto si ya forman parte de la comunidad Desigual como si conectan a través de ellas por primera vez con la marca.
Anillos, pendientes, colgantes, chokers y brazaletes configuran esta colección, en la que predominan elementos como corazones que parecen derretidos, texturas modeladas a mano, mariposas abstractas y hasta mensajes en español como “amar hasta arder” o “deshacerse amando”.
La inspiración
Bajo el concepto de “Amor”, las joyas pretenden despertar el amor propio desde lo más profundo del corazón. Cada pieza es un recordatorio de nuestra naturaleza moldeable. Como las mariposas, las personas somos fruto de una transformación notable y constante, forjada desde el interior. En este camino interminable de evolución, trazamos una espiral infinita. Estas joyas quieren inspirar una promesa personal, íntima, que nos conecte con nuestra paz interior y el cambio constante. En esta colección, cada pieza esconde un mensaje: solo quien la lleve podrá descifrarlo.
“Las palabras que definen la colección -dice Gala Meyer- son transformación, conexión, amor. Las piezas reflejan el proceso de descubrirse a uno mismo, de ver la persona en que te has convertido y quererte más que nunca. A la vez, también son una oda a los dos polos -el frío, el calor; la luz, la oscuridad- que laten en el amor, que siempre debe quemar, como también quema el desamor”.
El proceso creativo
Fue el propio fundador de Desigual, Thomas Meyer, quien al descubrir la faceta como diseñadora de joyas de su hija la animó a desarrollar una colección completa para la marca. “Este proyecto ha sido un honor y me ha permitido darme cuenta de la enorme influencia que Desigual ha tenido en mí”, comenta Gala. “Yo he crecido mientras la marca también lo hacía. Sus mensajes, su historia, son ideas que han calado en mí. Thomas Meyer ha sido decisivo en mi desarrollo y de él y del proyecto me he nutrido. Me ha aportado mucho”, concluye.
La creativa, graduada en Artes Visuales por el Bennington College de Vermont (EEUU), comenzó a experimentar con la joyería durante su maternidad y creó su propia marca, Zalio. Ahora, tener estas joyas para Desigual terminadas “ha sido como verlas cobrar vida”, según sus propias palabras.
Sobre el proceso creativo, Gala lo explica así: “Con cera, hago cada molde a mano. Es un proceso muy íntimo, delicado, en el que mis propias huellas quedan impresas en el material y acaban en la pieza final. Se puede descifrar cada movimiento que he hecho hasta llegar a la joya acabada”. Para la producción de las piezas y de las imágenes que acompañarán su comercialización, la diseñadora ha trabajado codo con codo con los especialistas de producto y con el equipo de marketing de Desigual.
Desigual
Desigual es una compañía de moda internacional nacida en Barcelona en 1984. Se caracteriza por la singularidad y el carácter único de sus creaciones, pensadas para vestir de positivismo y autenticidad a miles de personas que buscan expresar la mejor versión de sí mismas. En la actualidad, la compañía cuenta con más de 2.700 empleados y está presente en 100 países a través de 10 canales de venta, 415 tiendas monomarca y seis categorías de producto: Woman, Man, Kids, Accesories, Shoes y Sport.