Los viajes exóticos
a los confines más lejanos fueron los objetivos de las grandes viajeras que
dejaron su huella en la historia. Esos paraísos remotos, entonces inexplorados,
han servido de inspiración para la nueva colección de íntimo de SARDA para el
próximo otoño.
Como las pioneras
aviadoras y las valientes exploradoras de otros tiempos, Nuria Sarda ha dejado
volar su imaginación para viajar entre sedas y encajes y construir una
colección de moda íntima con nombres tan sugerentes como Kioto, en Oriente;
Ghizeh o Sahara, en África.
Las colecciones de
SARDA se reconocen por su estilo, que sigue de cerca las tendencias de moda
exterior para trasladarlas a la moda íntima, y por la calidad de los materiales
que Nuria Sarda selecciona para su confección. Son prendas desenfadadas y
modernas, que arriesgan en sus propuestas y llegan a un publico joven y
cómplice que busca un producto de moda dentro de unos parámetros de lujo y
exclusividad.
Los estampados, el
colorido o los pequeños detalles, dan plasticidad a las prendas, que se cortan
en los tejidos de íntimo más originales, pero también más altos de gama, en
busca de una calidad y unas prestaciones que son el sello de la compañía que
Andrés Sardá fundó hace 50 años.
Seda, terciopelo,
tul, los encajes más especiales y los detalles más sorprendentes se alían con
los acabados de ultima generación: la fibra lycra aporta elasticidad incluso a
la seda más liviana, las partes traseras de las bragas son de doble tul, sin
costuras, para que no se marquen, los tirantes se trabajan planos para una
mejor adaptabilidad, y los patrones buscan de forma eficaz la sujeción y el
confort. Además, las colecciones de Sarda ofrecen varias tallas de copa y
algunos de los modelos llegan hasta la talla 100, para que sus piezas de moda
íntima lleguen a todas las mujeres.
Para el próximo
otoño, los destinos exóticos dejan su huella en las prendas. Toques de
inspiración oriental que refieren en particular a Japón, detalles de piedras
preciosas que nos remiten a África, o construcciones arquitectónicas y estilo urban chic inspirado en las ciudades de
America del sur.
La nueva colección
de SARDA consta de tres líneas: KYOTO, GIZEH y SAHARA.
KYOTO
Inspirada en la
tradición japonesa, Kyoto mezcla la seda estampada con el tul elástico. El print de la seda, a base de flores,
encaja en la tendencia asiática que también influye en la moda exterior para el
próximo otoño-inverno.
Como detalle, las
prendas van ribeteadas en contraste por una cinta elástica de terciopelo.
La seda estampada
está en todas las copas de los sujetadores y en el delantero de las bragas,
mientras que el tul elástico se utiliza para las espaldas de los sujetadores, a
los que asegura un optimo patronaje, además, interviene en el delantero de dos
modelos de bragas.
La serie consta de
4 sujetadores y cuatro bragas. Un primer modelo de sujetador de copas con aro y
doble tirante de terciopelo elástico, pensado para tallas que necesitan
capacidad y que se presenta en copa D y llega hasta la talla 100; otro
sujetador con aros en copas B y C; un sujetador con relleno, de copa lisa para
que no marque; y un push-up. Los tres
últimos modelos llevan el tirante plano característico de la casa, forrado en
terciopelo elástico.
En cuanto a las
bragas, la de cintura baja y el tanga, tienen el delantero de seda estampada,
mientras que el boxer tanga y la braga combinan un triangulo en la parte
central en seda estampada con los laterales en tul. Todas las bragas van
ribeteadas en su contorno de terciopelo elástico a contraste.
Como prenda de
complemento, se entrega un top de seda estampada, de corte oriental, con cuello
alto, hombros al aire, y ribetes de terciopelo en las sisas y el cuello, que es
una propuesta perfecta para llevar como pieza exterior.
El exquisito
colorido también se inspira en la tradición japonesa. Gobi tiene el nude como base, y el trazo de las flores
y los ribetes en un morado suave, relleno de malva. Vivid Red presenta un
llamativo fondo rojo, con el dibujo de las flores y los ribetes en negro, y
toques luminosos de blanco y gris.
GIZEH
Una serie que
mezcla tul plumetti flocado muy
suave, con encaje leavers elástico,
que se incrusta en el tul y bordea todas las prendas. Hay que destacar el
alarde técnico y la precisión con la que el encaje se ensambla con el tul, en
particular cuando cruza el centro de las copas, con un trabajo parecido al de
la marquetería en versión textil.
Como tercer
elemento, las prendas llevan un ribete más oscuro, del mismo tono que el tul.
Hay cinco modelos
de sujetador: Un sujetador con aros; un push-up,
y otro sujetador con aros, que permite capacidad, que presenta por primera vez
en las colecciones de Sarda una copa E. Estos tres modelos llevan el encaje
siguiendo el escote. Además, hay un sujetador con relleno, con las copas lisas
para llevar con prendas ajustadas y que no marque, que lleva el encaje en la
base de la prenda; y un nuevo patrón
triangular con los tirantes en doble posición se pueden abrochar en la nuca
dejando la espalda limpia que lleva el encaje incrustado en el centro de las
copas.
Las bragas de la
serie son: una braga media, una brasileña y un boxer, que llevan el encaje en
posición horizontal atravesando el centro del delantero; y un tanga con el
encaje en la cinturilla.
Como prendas de
complemento se ofrece un top de escote caja y manga larga en tul plumetti rematado en ovelock, excepto en el escote, que lleva
ribete; y un camisón lencero en tul plumetti
con tira de encaje en la base del pecho.
Para el colorido,
Gizeh vuelve la mirada hacia el continente africano y las piedras preciosas que
salen de sus minas, para bautizar como Fossil el tono visón que iguala encaje y tul, aunque los pequeños
lunares del plumetti que lo flocan
son de un tono marrón más oscuro. Tourmaline, el segundo colorido, mezcla tul
violeta con el plumetti y el encaje
en el mismo tono visón de la combinación anterior; por ultimo, Black, da a
todos los elementos el mismo color negro.
SAHARA
Una línea que nace
bajo la influencia de la tendencia joya y que tiene como principal tejido el
encaje leavers elástico, con bordado
de motivos florales. Se combina con tul elástico trabajado en doble capa y sin
costuras, para que mantenga la sujeción sin que se note. La mezcla de ambos
tejidos crea muchas combinaciones distintas
que dan lugar a prendas más o menos sofisticadas, según domine el encaje
o el tul.
La joya es un
pequeño detalle de lazo de tul con una perla en el centro, que adorna los
sujetadores en el centro del pecho o en un tirante.
Los cinco
sujetadores que componen la serie son: con aros en copa D, balconet con costura horizontal, push-up con almohadilla extraíble, un triangular de fantasía hasta
aquí, todos con las copas de encaje y un sujetador con relleno, de copa lisa,
con el encaje aplicado encima, en diagonal. Todos los sujetadores, a excepción
del triangular de fantasía, llevan doble tirante de spaghetti. Los lazos de tul con perla van en la base del tirante de
los tres primeros modelos, y en el centro del pecho en los dos últimos.
Las tres bragas
son: braga media, en tul liso, con motivo de encaje detrás; tanga liso por
delante y de encaje por detrás, y boxer tanga con pieza ancha de encaje.
Como complemento,
la serie Sahara propone un liguero con la cinturilla de encaje y el resto en
tul, con un pequeño fruncido en el centro. La prenda lencera, es un refinado baby doll con el pecho de encaje, que
también se recoge en un drapeado central, que adorna el lazo con la perla. El
resto de la prenda es de tul transparente.
El colorido es
favorecedor, con matices llenos de profundidad como el intenso Buganvilia, un
granate violáceo; el misterioso Fjord, que es azul petróleo; o el moderno Café
au Lait, un tono de la gama maquillaje.