"Hemos hecho que unas diez mil personas trabajen con total seguridad esta semana -dice Raffaello Napoleone, CEO de Pitti Immagine- y este es el primer gran resultado que quiero destacar. Las ferias comerciales de Pitti fueron las primeras entre los principales eventos internacionales de moda en reabrir. Hemos sido un precursor y un modelo. Stazione Leopolda para Pitti Filati, luego Fortezza da Basso para Pitti Uomo y Pitti Bimbo, eran los espacios físicos y al mismo tiempo los lugares simbólicos de un reinicio de la moda. En general no me dedico al sentimentalismo, pero si hubo una figura especial para los días de feria que terminan hoy, es la combinación de ganas, necesidad, placer de volver a verse en persona, de intercambiar ideas y comentarios, incluso de compartir las dificultades vividas en el pasado reciente y que aún están con nosotros, junto con la reafirmación de un amor intacto por el trabajo a través de la presentación de las nuevas colecciones. Los datos sobre la participación de los compradores deben leerse en este contexto, donde la calidad, la motivación y la concentración fueron los elementos más destacados por los propios expositores".

Mientras que Pitti Filati -del 28 al 30 de junio- registró la presencia de más de 1.700 compradores y profesionales (Francia, Alemania y EEUU entre las mejores actuaciones), Pitti Uomo y Pitti Bimbo en La Fortezza (del 30 de junio al 2 de julio), pocas horas después del cierre, ya habían superado los 6.000 visitantes (de los que más de 4.000 eran compradores), con un porcentaje global de compradores extranjeros de algo menos del 30%.

Con algunas sorpresas. Además de los países europeos (Alemania, Francia, Suiza, España, Austria, Holanda, Bélgica, Rusia, Polonia, Grecia y Portugal a la cabeza), llegaron compradores de Estados Unidos (impulsados por grandes almacenes como Bergdorf Goodman y Neiman Marcus), procedentes de Canadá y Turquía, y también de los representantes europeos de los principales grandes almacenes y grupos minoristas de China, Hong Kong, Japón y Corea, países desde los que aún no es posible viajar. Una asistencia limitada, pero extraordinariamente significativa. La presencia de los medios de comunicación también fue significativa: más de 700 periodistas asistieron a las ferias, de los cuales unos 300 eran extranjeros.