El resultado son pañuelos de seda o cachemir y modal de distintos tamaños, para llevar de muchas formas, de pies a cabeza, tantas como te puedas imaginar. El complemento más versátil tanto para ellos como para ellas. Una pincelada de color y la estrella de un looks sobrio, el punto de partida para la tendencia más actual o el punto final de una puesta en escena con prendas extravagantes. Todos los fulares están diseñados con el alma en Barcelona y fabricados en Italia. Con un precio que va des de los 63 € hasta los 126 €.
