En Mislita se quieren recuperar valores ya olvidados. Vestir en los pies unas “mislitas” es apostar por lo tradicional y a la vez por la vanguardia, por lo exclusivo pero al mismo tiempo, por lo asequible.
Producen en fábricas dónde se siguen cortando muchas piezas a mano, donde dan un tratamiento natural 100% a las pieles y a todos los materiales con los que se trabaja. Se mima el zapato en cada paso para su elaboración y esto se refleja en cada mislita.
Hechas con amor y 100% made in Spain.
Mislita apuesta por llevar la marca España muy lejos, para decirle al mundo que aquí también se hacen las cosas bien.
Cada modelo lleva el nombre de una mujer relevante en la historia. Muchas son conocidas, otras nunca lo serán. Ha querido hacer llegar a la sociedad sus historias, que sean reconocidas y que la gente pueda admirarlas. Han sido mujeres relevantes, mujeres que con su esfuerzo han conseguido un mundo mejor, que han dejado legados maravillosos y qué menos que acercar, a gran parte de la sociedad, pequeñas historias sobre su vida. Es su manera de darle las gracias.