No es la primera vez que Mango empodera a su comunidad tomando como base el criterio de los casi 11 millones de seguidores con los que cuenta en su perfil de Instagram. Ya en la campaña Primavera/Verano 2018, los usuarios pudieron decidir sobre los looks de los modelos eligiendo aquellos accesorios que más les gustaban. Ahora, la firma va un paso más allá implicando a sus seguidores también en cuestiones relacionadas con el desarrollo de la colección y la campaña.
El interés por la moda, la cultura, el estilo y el arte es el componente común entre la marca y su comunidad y el propósito que hace que la creación de espacios y conversaciones compartidas sea fundamental en todas sus comunicaciones.
Mango nació en 1984 y, a día de hoy, es uno de los principales grupos de moda del mundo. Con origen y sede central en Barcelona, dispone de una extensa red de 81 7.000 m2 en más de 110 países. Desde su Centro de Diseño “El Hangar” en Palau-solità i Plegamans se diseñan cada año más de 18.000 prendas y accesorios acordes a las tendencias de la temporada. La compañía cerró 2018 con unas ventas de 2.233 millones de euros.