En términos anuales, y a pesar de la pandemia, se mantiene prácticamente la cifra, aunque se establece un descenso de 1219 autónomos. Si se atiende a las cifras interanuales el empleo por cuenta propia se consolida como alternativa estable durante la crisis sanitaria actual, frente al de los asalariados, donde el primero sufre un ligero descenso del -0’04%, mientras que el segundo sufre una caída del 2’2%. Para la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE), las cifras dan visibilidad a la necesidad de la creación de un nuevo paquete de ayudas directas que amplíe el escudo social para los autónomos y que permita que puedan seguir ejerciendo su actividad diaria pese a la situación cada vez más delicada que atraviesan.
Las cifras que en su conjunto y en consideración por UATAE “son mejor de lo que cabría esperar, debido al enorme esfuerzo que están haciendo las trabajadoras y trabajadores por cuenta propia para aguantar”, y proyectan también cuáles han sido los sectores más afectados por la pandemia. En el último mes el sector más afectado ha sido el de la hostelería, con 3.151 autónomos menos que el mes anterior que se une a la pérdida del sector comercio (-210 autónomos).
“Los datos son claros, pese a que se logra mantener en términos interanuales la caída de la afiliación de los autónomos, los sectores que han sufrido en mayor medida las restricciones sanitarias salen más perjudicados durante la pandemia” indica María José Landaburu, Secretaria General de UATAE, que, además añade: “venimos reclamando al Gobierno un apoyo decidido hacia estos sectores, el impulso de nuestro tejido productivo no puede limitarse a la dotación y ampliación de los créditos ICO, esto debe ir conjugado con la aplicación de moratorias en los préstamos, hipotecas y productos financieros y con una línea potente de ayudas directas para afrontar los gastos fijos de la actividad que se mantienen a pesar de la crisis y que están ahogando a muchos autónomos”.
UATAE destaca, además, que la salud debe ser la prioridad, pero las restricciones sanitarias a la hostelería y comercio deben acompañarse de medidas económicas y sociales que ayuden a la actividad diaria de los trabajadores y trabajadoras autónomas. Y más atendiendo a las cifras proporcionadas por la Seguridad Social en términos anuales, donde los sectores con mayores pérdidas son: comercio con un descenso de -11.019 autónomos; hostelería con -4.659 e industria manufacturera (-4.685). En contrapartida los que más aumentan son: transporte y almacenamiento (+7.805); construcción (+6.450) y actividades profesionales (+2.626).
Para María José Landaburu “es importante alcanzar estas últimas cifras positivas de ascenso en todos los sectores, y sobre todo en aquellos más perjudicados como son los sectores de la hostelería, comercio, taxi y actividades ligadas al ocio y el sector de la cultura” por todo ello “la administración debe hacer frente a la situación actual y dotar de las ayudas que los autónomos venimos reclamando desde el inicio de la pandemia”. Desde UATAE recalcan que “los autónomos no pueden continuar a la espera de mejores perspectivas, necesitan ayudas urgentes ante la situación cada vez más delicada que atraviesan”.