La Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE) ha emitido hoy el segundo informe de su Observatorio de Apoyo Financiero por el Covid-19, puesto en marcha para el seguimiento de la línea de avales públicos habilitada por el Instituto de Crédito Oficial (ICO). Fruto del estudio de la aplicación del primer tramo de avales y con el segundo ya aprobado por el gobierno el pasado viernes, desde la Unión de Autónomos exigen que se establezcan medidas para evitar que los bancos puedan rechazar préstamos a autónomos y PYMES si ya cumplen con las condiciones del ICO, incluso proponen que se añadan nuevos parámetros para proteger a quien más necesita la financiación y que el aval público pueda ser, frente al 80% actual, del 100% en créditos de un máximo de 200.000 euros para autónomos y PYMES con hasta 10 empleados y facturación anual de dos millones de euros, y hasta el 90% para autónomos y PYMES en créditos de un importe máximo de 800.000 euros cuando tengan hasta 50 empleados y facturación anual en el tope de 10 millones de euros. UATAE recuerda que Alemania e Italia ya han tomado medidas similares para garantizar que el esfuerzo público salva al corazón de la economía que son los trabajadores autónomos y las PYMES”.

UATAE ha detectado también que las entidades financieras están sometiendo las solicitudes de préstamos a calificaciones de riesgo con criterios de solvencia y rating que acaban resultando abusivos, puesto que introducen elementos arbitrarios de cada entidad aplicados en condiciones normales a un recurso público excepcional como son estos avales. “El criterio no debe ser restringir el acceso a estos préstamos, sino el de multiplicar su alcance para salvar la economía”, apuntan desde la organización de autónomos. En este sentido, UATAE propone, junto al fin de estas prácticas, que cada banco tenga la obligación de hacer constar en un registro oficial las solicitudes de operación denegadas con su motivación, el establecimiento de un plazo máximo para resolver las solicitudes y evitar dilaciones arbitrarias innecesarias, y controlar semanalmente el importe consumido por cada entidad para vigilar que no se produzca el desvío de demanda de esta financiación a otros préstamos o productos.

Para UATAE es positivo que las reivindicaciones expuestas al inicio de esta línea de avales hayan hecho saltar las alarmas del propio ICO y del Banco de España, que han afirmado que serán especialmente vigilantes para combatir la venta de productos cruzados como seguros de vida y otras prácticas abusivas. En este sentido, es necesario seguir tomando medidas que recuerden al sector financiero que tiene la obligación moral de estar a la altura, y devolver así el esfuerzo que el mercado productivo, el tejido económico y la propia administración invirtieron en él tras la crisis financiera de 2008.