Con esta reunión la Asociación quiso presentar a los eurodiputados en un sector amplio y exhaustivo, lo que representa un activo importante para Europa, no sólo en términos de calidad de la producción.
Annarita Pilotti dijo: "El calzado italiano tiene cerca de 6.000 empresas que emplean a 80.000 personas es una realidad importante que necesita políticas europeas capaces de proporcionar acceso de las empresas a los mercados a través de acciones de propulsión más fuertes; así como negociaciones bilaterales con las principales áreas estratégicas tales como el área del Mercosur, cerrado debido a las fuertes barreras arancelarias y no arancelarias, o los Estados Unidos, nuestro tercer mercado, donde es necesario lograr un alineamiento de las normas reglamentarias y de certificación y una disminución de los derechos de aduana. En este sentido, nuestra Asociación pide el cierre a corto plazo del acuerdo entre los EE.UU. y la Unión Europea TTIP (Alianza transatlántica para el comercio y la inversión). Y Japón también tiene un desequilibrio en el comercio que es difícil de entender: un sistema de cuotas, controlada por la distribución local, que proporciona derechos prohibitivos más allá del umbral determinado por el gobierno cada año".
Por lo tanto, Assocalzaturifici sigue concediendo gran importancia a Europa y tiene la intención de trabajar en conjunto con las instituciones europeas para un marco de reglas claras que favorezcan la fabricación.
Se presta especial atención a la llamada reapuntalamiento, un fenómeno que en algún momento está lanzando señales interesantes para un retorno de la producción en Europa, y formas innovadoras de acceso al crédito para las PYME que pueden favorecer sus raíces en Italia. Entre las medidas en esta dirección Assocalzaturifici espera un aumento de las inversiones en proyectos de formación profesional que mejoran la excelencia ya presente en varios distritos del calzado italiano.