En sus últimas previsiones, el Banco de España calcula que el IPC cerrará 2022 con una subida interanual del 7,2% para desinflarse hasta el 2,6% en 2023 y el 1,8% en 2024. Así, la inflación no deja de ser el primer problema económico de nuestros días.

Al mismo tiempo, siguen existiendo problemas en la cadena de suministro, lo que hace que la tasa de inflación siga aumentando.

La situación del mercado plantea grandes retos a los minoristas. Y es que, debido al aumento de los precios, los consumidores están cambiando sus hábitos de consumo: el 28% de la población española apuesta por buscar otras marcas alternativas que puedan satisfacer sus necesidades.

Para comprar de forma más consciente de acuerdo con los precios, los consumidores quieren hacer cada vez más sus compras online. Según una encuesta, compran por Internet con el objetivo de encontrar mejores ofertas y poder comparar con mayor facilidad los precios.

En este sentido, los consumidores confían especialmente en los marketplaces online: una encuesta realizada por Mirakl,, demostró que suponen la forma más cómoda de comprar para el 70% de los consumidores. Según el estudio, los compradores prefieren los marketplaces online sobre todo por los precios más bajos, la rapidez de entrega y la mejor selección de productos. Desde el punto de vista empresarial, un marketplace ofrece a los minoristas una mayor protección frente a los cuellos de botella en el suministro y aumenta la flexibilidad y la capacidad de adaptación a las situaciones actuales y futuras del mercado.