Este nuevo espacio es el resultado de un estudio comparativo que se ha llevado a cabo en cuatro territorios europeos —Cataluña, Berlín, Grenoble y Prato— y ofrece una mirada clara y actualizada sobre la realidad y los retos de nuestra industria.
Una visión detallada del sector
La página recoge información de gran utilidad para empresas, instituciones y profesionales. Permite conocer, de forma sintética y visual, cómo se gestionan los flujos textiles en Cataluña: desde la producción y el empleo hasta la recogida y el tratamiento de residuos, así como los hábitos de consumo de la ciudadanía.
En cifras globales, en Cataluña se generan cada año casi 155 kilotoneladas de textiles, pero solo un 13 % de los residuos domésticos se recogen de forma diferenciada. La mayor parte acaba en vertederos o incinerado. Además, únicamente un 21 % de lo recogido se reutiliza en el ámbito local, lo que muestra que existe un amplio margen de mejora para avanzar hacia un modelo circular.
El sector textil da empleo a unas 90.800 personas, distribuidas de forma equilibrada entre actividades de fabricación, comercialización y gestión del fin de vida de los productos.
Infraestructura y acceso a servicios
El análisis también identifica diferencias territoriales dentro de Cataluña. En la zona metropolitana de Barcelona y la costa, existen cientos de puntos de recogida, reparación o reutilización a menos de 10 minutos en coche, lo que facilita el acceso de la población a servicios circulares. En cambio, en las zonas interiores hay menos de un centenar de puntos, y la accesibilidad a pie resulta mucho más limitada.
Estos datos ponen de relieve la importancia de seguir ampliando y equilibrando la red de infraestructuras en todo el territorio.
Hábitos de consumo
El estudio de SOLSTICE revela también cómo se comportan los consumidores en Cataluña. El precio sigue siendo el principal factor de decisión, especialmente entre los más jóvenes, que se ven más influidos por tendencias y presiones externas. Esto se traduce en un consumo menos circular.
La ropa de segunda mano todavía arrastra estigmas sociales y los servicios de reparación son poco utilizados. En cambio, los consumidores de más edad tienden a apostar por prendas de mayor durabilidad y por marcas consolidadas. Estos datos ofrecen pistas claras para diseñar campañas de sensibilización y estrategias de mercado más alineadas con la circularidad.
Retos y oportunidades
El informe señala varias líneas de actuación para avanzar en la transición:
- Ampliar la recogida diferenciada y hacerla más accesible en todo el territorio.
- Impulsar campañas educativas que promuevan el consumo responsable.
- Fomentar el diseño circular y la implantación del pasaporte digital del producto.
- Reforzar la colaboración público-privada, integrando a empresas, administraciones, centros de investigación y entidades sociales.
Una ventana informativa para el sector
La nueva página sobre Cataluña no es solo un repositorio de datos. Es, sobre todo, una ventana informativa para entender el presente y futuro del sector textil, que permite tomar decisiones mejor fundamentadas, identificar oportunidades de innovación y reforzar la competitividad de la industria.
Circle Economy, en colaboración con el Departament de Territori, Habitatge i Transició Ecològica de la Generalitat de Catalunya, llevó a cabo un análisis del estado actual del ecosistema textil en Cataluña, donde ya se observan prácticas circulares cada vez más extendidas.
Puedes consultar la página completa en este ENLACE.















