Sin embargo, los datos de paro, contratación y afiliación a la Seguridad Social de este mes están absolutamente condicionados por las decisiones gubernamentales de paralización de la actividad como principal medida de contención sanitaria derivada del COVID-19, que ha aparejado un parón casi absoluto de la actividad económica, limitada exclusivamente a los sectores esenciales, advierte la CEOE.
En esta situación, grave desde la vertiente sanitaria y social, las cifras de desempleo evidencian que las empresas están acudiendo, de forma mayoritaria, a medidas de regulación temporales (ERTES) buscando el menor impacto en el empleo.
Con la vista puesta en la finalización de la crisis sanitaria, y el interés de CEOE centrado en la aminoración de sus efectos sociales y económicos, en la Ceoe entendemos imprescindible flexibilizar el uso de los ERTES y eliminar el límite de su utilización, circunscrito al período de alarma, para contribuir a la recuperación de sectores que, como en el caso del turismo o la industria, va a ser gradual, evitando con ello consecuencias graves y duraderas sobre el empleo.
En este contexto, reclama la Ceoe, es imprescindible implementar medidas que den seguridad jurídica y fiabilidad a las empresas y a los inversores, instrumentalizadas a través del diálogo social, para adaptar la actividad económica a la evolución diaria de la pandemia con el fin de garantizar una salida más rápida de la parálisis económica, la pervivencia de las empresas y del empleo.