España se encuentra en un momento decisivo en su transición hacia una gestión eficaz de los residuos textiles. La Asociación Ibérica de Reciclaje Textil (ASIRTEX) ha planteado públicamente en LinkedIn una cuestión crítica: «¿está preparada España para gestionar correctamente sus residuos textiles?». Desde su punto de vista, «el sistema actual de recogida separada no está funcionando como debería, y el riesgo de colapso en el manejo de estos residuos es real si no se actúa con rapidez y coherencia».
Un sistema de recogida aún insuficiente
Los datos reflejan un desafío estructural: en España apenas el 12 % de los residuos textiles son recogidos de forma separada, mientras que el resto —alrededor del 88 %— termina en vertederos o incineradoras.
Este porcentaje, que se ha colocado en la línea de salida hacia la plena aplicación de la nueva normativa europea para 2025, deja claro que la separación en origen y su posterior gestión todavía están muy lejos de ser eficaces. Muchos ciudadanos y administraciones aún no disponen de sistemas suficientemente accesibles y visibles para depositar textiles correctamente, lo que limita la recuperación y el reciclaje eficientes.
Además, informes señalan que en regiones como Cataluña hasta el 90 % de los residuos textiles generados acaban en vertederos o incinerados, reduciendo drásticamente las oportunidades de reutilización o reciclaje.
Normativa, cooperación y nuevas iniciativas en marcha
La buena noticia es que la legislación europea y estatal está impulsando cambios: la nueva Ley de Residuos, alineada con el European Green Deal, obliga a todos los municipios a implantar sistemas de recogida separada antes de finalizar este 2025.
Además, iniciativas privadas y colaborativas están avanzando. El proyecto RE-VISTE, promovido por grandes operadores del sector de la moda y distribuidores, ha lanzado en 2025 un programa piloto para instalar contenedores específicos en municipios, centros comerciales y espacios públicos, con el objetivo de facilitar la recogida y canalizarla hacia el reciclaje o la reutilización.
Hacia un modelo verdaderamente circular
Pese a estos avances, muchas voces del sector —incluida ASIRTEX— insisten en que no basta con legislar, sino que es imprescindible planificación, inversión, coordinación público-privada y fortalecimiento de infraestructuras de recogida, clasificación y tratamiento.
Organizaciones especializadas como Humana España muestran que, con trazabilidad y buenas prácticas, se puede aumentar la reutilización de prendas recogidas, aunque el sector aún enfrenta retos importantes de control, transparencia y eficiencia.
En definitiva, España está dando pasos hacia una gestión más circular de los residuos textiles, pero aún no está completamente preparada. La transición requiere reformas profundas en la recogida separada, mayor concienciación ciudadana, inversiones en infraestructura y una regulación que empuje al sector a sistemas efectivos de reutilización y reciclaje. Si no se acelera este proceso, el advertido riesgo de colapso que hace ASIRTEX podría materializarse en demasiadas localidades.
















