AERESS, se suma a la iniciativa de su red europea RREUSE que solicita a los responsables políticos nacionales y de la UE que tomen medidas urgentes para evitar el colapso de la cadena de valor del textil usado. En 2025, la recogida selectiva de residuos textiles será obligatoria en toda la Unión Europea. Este nuevo requisito supondrá una presión adicional para el sector, que ya ha estado luchando contra la saturación del mercado creada por la industria de la moda rápida y el aumento de los costes operativos.
Para lograr mayor incidencia en España, AERESS junto a Moda re-, han trasladado estas mismas exigencias al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, replicando la iniciativa europea a nivel estatal en una Carta Abierta. Los cofirmantes piden desbloquear los mecanismos de financiación transitoria de emergencia para garantizar la supervivencia del sector durante el periodo comprendido entre el inicio de la recogida selectiva y la entrada en vigor de la RAP (Responsabilidad Ampliada del Productor).
Puedes leer ambas cartas aquí o, por su interés, leer el texto a continuación:
CARTA ABIERTA AERESS – Moda re-
Sobre la necesidad de un Plan de Acción de Emergencia Textil
A LA ATENCIÓN del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, y Consejerías autonómicas de Medio Ambiente:1
Muy señora mía:
El motivo de la presente comunicación es trasladar la grave emergencia que está atravesando el sector del textil usado en la actualidad.
El colapso actual se enmarca en un contexto muy preocupante: por un lado, el aumento de producción de textil de mala calidad proveniente de la moda rápida y ultra rápida y, por otro, la saturación del mercado transfronterizo.
En menos de un mes, entrará en vigor la recogida selectiva de textil, que prevé un aumento considerable de los volúmenes de recogida. Y, sin embargo, aún no está definido el sistema de responsabilidad ampliada del productor, las tasas y la financiación de los costes de recogida, transporte y clasificación de este residuo.
Por tanto, urge el apoyo financiero al sector para que no se dé lugar a quiebras y cierres de empresas como está ocurriendo en Europa: perdiendo infraestructuras, recursos y puestos de trabajo. Se trata de salvar a un sector clave para la transición hacia una economía circular.
A mayor abundamiento, en España el sector está protagonizado mayoritariamente (en un 64%) por entidades sin ánimo de lucro, pertenecientes a la Economía social y solidaria, y comprometidas con el medio ambiente y las personas. Así, en su mayoría son empresas de inserción, que tienen el propósito de generar trabajo digno y de calidad para personas vulnerables. El colapso descrito produciría la destrucción de este tejido empresarial social y, de acuerdo con datos de RREUSE, una sola empresa social crea entre 20 y 35 puestos de trabajo para personas en riesgo de exclusión social por cada 1.000 toneladas de residuos textiles recogidos.
El apoyo financiero debe garantizar la supervivencia del sector durante el periodo entre el inicio de la recogida selectiva y la implantación de la RAP. Además, en consonancia con la jerarquía de residuos, esta financiación de emergencia debería dar prioridad a la preparación para la reutilización local. Extremos que realizan las entidades asociadas a las redes firmantes, que priorizan la reutilización, la venta y entrega social en sus tiendas de segunda mano.
Otras medidas a medio plazo deberán incluir esfuerzos por el correcto desarrollo de la RAP, obligaciones para productores en eco-diseño, control al exceso de producción, desarrollo de opciones de reciclaje, así como eco-modulación por parte de la legislación europea y nacional. Pero nada de esto podrá definirse si por el camino el sector colapsa y desaparece.
Por lo que, las entidades firmantes, reclaman urgentemente un plan de choque para apoyar al sector de la gestión del residuo textil y asegurar que tiene los medios, las infraestructuras y los recursos para poder continuar sus labores y su apuesta por la economía circular y social.
Estamos a su disposición para una reunión y esperamos su respuesta,
AERESS y MODA RE-
Noa (1): Esta comunicación se remite en el contexto del colapso del sector a nivel europeo y en consonancia con el escrito que han remitido las entidades RREUSE (de la que AERESS forma parte), ACR+ y Zero Waste Europe, a las instituciones europeas. Se acompaña como ANEXO 1 dicha comunicación traducida al castellano.
AERESS
La Asociación Española de Recuperadores de Economía Social y solidaria es la red de empresas sociales dedicada a la gestión de residuos, priorizando la preparación para la reutilización y la economía circular. Fundada en 1994, ha sido declarado de utilidad pública en 2010 y en la actualidad cuenta con 36 entidades asociadas en todo el territorio. Sus asociadas dan trabajo a personas vulnerables a través de la aplicación de la jerarquía de residuos en su gestión. Forma parte de la red europea RREUSE y ostenta el cargo de vicepresidencia de su junta directiva.
MODA RE-
Es la cooperativa de iniciativa social promovida por Cáritas española, y está formada por 50 empresas y cooperativas de inserción, que emplean a más de 1.400 personas, más de la mitad de ellas están realizando itinerarios de inserción, para facilitar su acceso al mercado laboral normalizado. Moda re- tiene por objeto la lucha contra la pobreza y la exclusión social mediante actividades relacionadas con el tratamiento y gestión integral de los residuos textiles, y la venta y donación social, a través de sus más de 170 puntos de venta. Todo ello en el marco de la economía circular, social y solidaria, en consonancia con el cuidado del medio ambiente y la sostenibilidad.
CARTA RREUSE
A la atención de: Comisión Europea (Jefe de Gabinete del Comisario designado para Medio Ambiente y Economía Circular, DG ENV, DG GROW, DG REGIO, DG EMPL) y a los Ministros de los Estados de Miembro con competencias en Economía y Finanzas, Clima y Medio Ambiente, y Trabajo y Asuntos Sociales.
Carta abierta
18 de noviembre de 2024
Re: Se necesita rápidamente un Plan de Acción de Emergencia Textil (TEAP) – Financiación de emergencia para evitar el colapso de la recogida, clasificación, reutilización y reciclado de textiles en la UE.
Estimados responsables políticos de la Unión Europea, estimados ministros:
Les escribimos para dar la voz de alarma sobre el futuro de la cadena de valor del textil usado y sus operadores dentro y fuera de la UE.
En menos de dos meses, la UE recogerá más residuos textiles que nunca con la entrada en vigor, el 1 de enero de 2025, de la obligación en toda la UE de garantizar la recogida selectiva de textiles. Muchos Estados miembros no disponen de sistemas operativos para cumplir esta obligación. Carecen de infraestructuras y financiación para la recogida, la reutilización local, la preparación para la reutilización y el reciclado. Aparte de eso, el mercado de textiles usados está al borde del colapso financiero, mientras que la financiación basada en la Responsabilidad Ampliada del Productor (RAP) no estará en vigor al menos hasta dentro de dos a cinco años. Incluso los países que ya cuentan con sistemas de RAP para el sector textil se enfrentan a una crisis sin precedentes, ya que el sistema sigue necesitando importantes inversiones y mejoras antes de poder funcionar eficazmente.
Nuestros respectivos miembros de toda la UE llaman su atención sobre el hecho de que el sector textil usado y de residuos de la UE se enfrenta a la mayor crisis de su historia. El sector existente está dotado de un saber hacer clave, infraestructuras, mano de obra y relaciones con el público que han ido construyendo durante décadas. Este sistema ya está sometido a una inmensa presión, y la crisis que se avecina empeorará aún más la situación debido a la falta de financiación y apoyo. Si no se hace nada para evitarlo, se producirá un importante retroceso en la capacidad de la UE para hacer frente a sus propios residuos textiles. Si se colapsan las infraestructuras existentes, la futura reactivación del sector costará mucho más que preservar las inversiones actuales. Esto provocará un grave retroceso en lugar de un avance hacia la transición a la economía circular y la competitividad de la UE. Además, una sola empresa social crea entre 20 y 35 puestos de trabajo para personas en riesgo de exclusión social por cada 1.000 toneladas de textiles recogidos. Por tanto, un colapso en este sector tendría graves consecuencias para las personas, el medio ambiente y la economía.
A falta de tasas de RAP adecuadas y eficaces para financiar la recogida y el tratamiento de los textiles postconsumo recogidos en el plazo establecido, pedimos una intervención a la altura de la gravedad de la crisis emergente: la UE debería proporcionar financiación de emergencia para proteger las instalaciones y los operadores existentes y el futuro de las cadenas de valor de los textiles usados.
El sector ha estado luchando desde que el auge de la moda rápida y ultrarrápida inundó el mercado con piezas de baja calidad basadas en combustibles fósiles que se producen a ritmos sin precedentes. Las infraestructuras existentes están sobrecargadas desde mucho antes de que comience la recogida selectiva obligatoria. Las plantas de clasificación -como SOEX, líder alemán en exportación y reciclaje de textiles de segunda mano y la mayor de Europa- están quebrando, afectadas por el aumento de las cantidades y la bajada de los precios. Los operadores no tienen a dónde enviar los artículos reutilizables ni pueden almacenarlos indefinidamente. Ya hay casos de textiles reutilizables y reciclables que se incineran porque ya no se pueden vender ni almacenar. Del mismo modo, el mercado transfronterizo de ropa de segunda mano de la UE está saturado, las opciones de reciclaje son incoherentes y las ventas al por menor están por debajo de todas las previsiones presupuestarias.
Dada la gravedad de la situación, pedimos un mecanismo de financiación transitorio de emergencia que pueda garantizar la supervivencia del sector durante el periodo entre el inicio formal de la recogida selectiva y la implantación de la RAP.
Hacemos un llamamiento a la UE y a los responsables políticos nacionales para que propongan un mecanismo de financiación, por ejemplo a través de las herramientas existentes de la UE como el Fondo de Recuperación y Resiliencia, el Mecanismo de Transición Justa, gestionado por CINEA, o préstamos del BEI con la obligación para las Organizaciones de Responsabilidad del Productor de devolver los préstamos a nivel nacional una vez que la EPR para textiles esté activa. Tanto si las subvenciones como los préstamos son el camino a seguir, su cuantía y estructura deberían estar disponibles rápidamente y adaptarse a las necesidades del sector.
De acuerdo con la jerarquía de residuos, esta financiación de emergencia debería dar prioridad a los esfuerzos de reutilización locales y regionales. La financiación debería dirigirse a los gestores encargados de la recogida, transporte, preparación para la reutilización y para el reciclaje, con especial énfasis en las empresas sociales que apoyan la integración laboral, la prevención de la pobreza de las personas en riesgo de exclusión socioeconómica; y la creación y ejecución de la recogida por parte de los municipios.
Esta medida es esencial para garantizar y proteger la competitividad y los recursos de la UE; y para que la UE demuestre que asume la responsabilidad de sus propios residuos, así como de la aplicación de sus propias leyes. La recogida selectiva y el tratamiento de los textiles post-consumo es un paso importante para alejarse de una economía lineal y avanzar hacia una economía circular. Los firmantes no desean arriesgarse a que se sigan vertiendo residuos textiles en países no pertenecientes a la UE por una cuestión de plazos. Por lo tanto, pedimos una solución inmediata a un problema inmediato. Esto no debe llevarnos a olvidar el origen del problema: la sobreproducción, que debe abordarse mediante fuertes requisitos de ecodiseño. Estamos a su disposición para una reunión y esperamos su respuesta.
Atentamente,
RREUSE
ACR
ZWE
AERESS
RREUSE
RREUSE es la mayor red europea de empresas sociales activas en la reutilización, la reparación y el reciclaje, cuyas 1.200 empresas sociales gestionan colectivamente más de 337.000 toneladas de textiles usados al año. Como tales, desempeñan un papel fundamental en la economía circular y ofrecen oportunidades de empleo y formación a personas alejadas del mercado laboral o en riesgo de exclusión socioeconómica. De media, una empresa social de la red RREUSE crea entre 20 y 35 puestos de trabajo por cada 1.000 toneladas de textiles recogidos.
Asociación de Ciudades y Regiones para la Gestión Sostenible de los Recursos (ACR+)
La Asociación de Ciudades y Regiones para la Gestión Sostenible de los Recursos ( ACR+) lleva ya 30 años defendiendo el papel crucial de las autoridades descentralizadas en relación con los recursos materiales y la economía circular. La red internacional reúne a autoridades locales y regionales que trabajan en la transición hacia sistemas circulares sin residuos en sus territorios y fuera de ellos, junto con otras partes interesadas. A través de sus diversas actividades, ACR+ proporciona a sus miembros herramientas concretas, datos técnicos y enfoques innovadores para llevar a cabo una transición justa y sostenible.
Zero Waste Europe (ZWE)
Zero Waste Europe (ZWE) es la red europea de comunidades, líderes locales, expertos y agentes del cambio que trabajan por un mejor uso de los recursos y la eliminación de los residuos en nuestra sociedad. Abogamos por sistemas sostenibles, por el rediseño de nuestra relación con los recursos y por un cambio global hacia la justicia medioambiental, acelerando una transición justa hacia los residuos cero en beneficio de las personas y el planeta.
AERESS
Asociación Española de Recuperadores de Economía Social y solidaria (AERESS) es la red de empresas sociales dedicada a la gestión de residuos, priorizando la preparación para la reutilización y la economía circular. Fundada en 1994, ha sido declarado de utilidad pública en 2010 y en la actualidad cuenta con 36 entidades asociadas en todo el territorio. Sus asociadas dan trabajo a personas vulnerables a través de la aplicación de la jerarquía de residuos en su gestión. Forma parte de la red europea RREUSE y ostenta el cargo de vicepresidencia de su junta directiva.