En vacaciones, las ‘compras predeterminadas’ bajan ya que preferimos dedicar nuestro tiempo a otras actividades como ir a la playa, disfrutar la montaña o hacer turismo; mientras que los impulsos aumentan. Al estar en un lugar diferente, fuera de nuestro entorno habitual, más cosas nos llaman la atención y estamos dispuestos a gastar más. Además, en las compras predeterminadas vamos a los establecimientos habituales, comparamos precios y calidades en distintas tiendas; lo cual no hacemos en vacaciones que nos dejamos llevar por el lugar y el momento.
Según datos de la firma de moda femenina KOKER, durante el verano se incrementa hasta un 27% las ventas en las ciudades de costa debido a las compras por impulso, mientras bajan o se estabilizan en el interior. En localidades con turismo todo el año como Benidorm, donde la empresa tiene tres establecimientos, el crecimiento en el periodo estival es más pausado, en torno al 12%. Pues en las últimas décadas, el turismo está viviendo una estabilidad en lugares de sol y playa y un aumento en destinos de ciudad. Este efecto se debe principalmente a dos motivos: por un lado, los países emergentes y, por otro, el nacimiento de las aerolíneas low cost. Ambos permiten viajar a personas que antes no podían económicamente.
“Hacemos turismo todo el año. Escapadas de inviernos, puentes, vacaciones… y en todos esos viajes compramos moda por impulso. Esta forma de consumo forma parte de nuestras ventas habituales en prácticamente todas las tiendas situadas en zonas turísticas independientemente de la ciudad o localidad. No obstante, en general, en las zonas de costa se produce un incremento tanto en verano como en periodos estacionales con buen tiempo. Por ejemplo, si en Semana Santa hace sol y apetece playa”, explica Priscilla Ramírez, CEO y fundadora de KOKER.
España batió en 2018 un nuevo record de turistas extranjeros alcanzando los 82,77 millones de visitantes, según datos de INE. La mayoría de turistas proceden de países como Alemania (11,4 millones) y Reino Unido (18,5 millones). Asimismo actualmente están aumentando los viajeros originarios de China (se incrementó un 26%), Japón (subió un 24%), Estados Unidos (creció un 11,8%), Rusia (ascendió un 6,3%) y países latinoamericanos como Brasil, México y Chile. Estos “nuevos” turistas rara vez buscan sol y playa, prefieren conocer la cultura española en destino de ciudad.
Los visitantes extranjeros gastaron 89.856 millones de euros en España en 2018, un 3,3% más que en 2017. En general, los turistas americanos y asiáticos gastan más que los europeos. Mientras un británico gasta de media en su viaje 127 euros al día; un chino gasta 273 euros diarios, un japonés, 423 y un estadounidense 259.
“Los turistas extranjeros quedan encantados con nuestra moda y filosofía de empresa. De hecho, fruto de esta satisfacción son las tiendas que tenemos fuera de España. Nuestra internacionalización de marca se debe a que los viajeros se han querido llevar el concepto KOKER a su país. Gracias a ese interés tenemos tiendas en México, Suiza, Italia…”, asegura la fundadora de KOKER.
Entre islas, ciudades autónomas y la península, España cuenta con 8.000 kilómetros de costa. Por lo que el turismo de sol y playa se expande por todo el territorio. Sin embargo, el turista que busca cultura, historia, tradiciones… se concentra en ciudades concretas como Barcelona, Madrid, Sevilla, Granada, Toledo… Lo positivo de esta tendencia es que las visitas se producen durante todo el año lo que da más estabilidad al mercado.
KOKER.- https://kokeronline.com/
KOKER es una empresa española de moda femenina de calidad, cuyo concepto clave es ofrecer ‘combinaciones completas’, outfits completos que inspiran a las clientas como si de un personal shopper se tratara. Con el objetivo de contar con las últimas tendencias, la firma lanza colecciones semanales con prendas y complementos inspirados en las pasarelas internacionales y las influencers más top.
El proyecto, liderado por Priscilla Ramirez, nació en otoño de 2014 en Toledo donde abrieron su primera boutique. Desde entonces, KOKER ya se ha instalado en 7 países y cuenta con 40 tiendas, cuatro de ellas en Toledo donde también tienen la sede central y el centro logístico. La marca ha apostado principalmente por la fabricación en España e Italia y por un estudiado patronaje con talla única que sienta bien a la mayoría de las mujeres, independientemente de su edad, peso o forma de cuerpo.