Junto con el sutil ambiente setentero del prêt-à-porter de esta temporada (blusas vaporosas con lazos en el cuello, coquetas minifaldas y destellos de estampados de leopardo), la campaña se centra en el nuevo bolso estrella de Longchamp. Su nombre, muy apropiado, es La Voyageuse, y se inspira en los neceseres vintage evocando tanto un viaje elegante como la famosa versatilidad de los diseños de Longchamp. La campaña de la firma presenta el bolso en diferentes variaciones atractivas, incluidas una de piel acharolada brillante y otra en piel de un color rojo atrevido con el nuevo monograma de la Maison, LGP, presentado durante la New York Fashion Show.
El gráfico diseño de triángulos de la pasarela de la Fashion Week fue un guiño a la alfombra diseñada por André Putman para el vuelo Air France Concorde, que cubría la ruta entre París y Nueva York (un viaje en el que se ha embarcado recientemente Longchamp). A su vez, este gráfico diseño también está presente en las imágenes de la campaña.