Además, la rápida evolución experimentada por los materiales en los últimos años y los dictados de la moda, que buscan cada vez productos más diferenciados e innovadores, ha incorporado a nuestra industria nuevos elementos de origen polimérico que aportan excelentes propiedades mecánicas, de aplicación, por ejemplo, en calzado deportivo, o con un elevado valor añadido desde el punto de vista estético, pero que presentan dificultades de adhesión con otros componentes.
Gracias a la unión de dos tecnologías, como son el plasma atmosférico y la robótica colaborativa, "podemos mejorar el pegado en calzado, independientemente del material que empleemos", asegura Carlos Ruzafa, investigador principal del proyecto PLASMABOT en INESCOP. En el proceso de pegado, la fase previa para la preparación de superficies, es clave. Con el uso de esta tecnología combinada, "sustituimos los actuales tratamientos superficiales como el lijado, cardado, halogenado o aplicación de disolventes, unificando así el procedimiento y garantizando un tratamiento", explica el investigador principal. Además, continua Ruzafa, "no solo conseguimos optimizar el pegado, sino que estamos mejorando el entorno del trabajador y la sostenibilidad, eliminando la utilización de sustancias tóxicas y la producción de residuos".
Los investigadores te explican el proyecto en el vídeo adjunto.
El plasma es capaz de interactuar con cualquier material, logrando efectos solo alcanzables por métodos químicos muy agresivos y perjudiciales tanto para la salud del operario, como del medioambiente, por ello su aplicación tiene que estar muy controlada, de ahí la necesidad de emplear la tecnología robótica. "Con la celda robótica colaborativa que hemos desarrollado, podemos digitalizar en 3D los pisos sobre los que se va a aplicar el plasma y de este modo, conseguimos una aplicación del plasma estable y localizada", explica José Mª Gutiérrez, técnico de robótica de INESCOP.
Los resultados de este proyecto han sido muy satisfactorios y además contribuyen con los objetivos de Economía Circular y del Pacto Verde Europeo, y posibilita que el sector del calzado avance, cada vez más, hacían un modelo productivo basado en la sostenibilidad.