Las medidas adoptadas se apoyan en el principio de corresponsabilidad entre los diversos agentes que actúan en la cadena productiva del sector textil La aplicación prioritaria en Brasil de un reciente acuerdo entre Zara y la Federación Sindical Textil Internacional (ITGLWF) se traducirá en la participación directa de los sindicatos brasileños del sector en el control de la cadena de producción El conjunto de medidas promueve condiciones adecuadas en la cadena de producción textil que garanticen su desarrollo sostenible y la generación de empleo.
Zara Brasil presentó hoy en la Comisión de Derechos Humanos y Minorías de la Cámara de los Diputados una serie de medidas cuyo principal objetivo es reforzar los mecanismos de control del cumplimiento de su Código de Conducta para Fabricantes a partir del principio de la corresponsabilidad.
La empresa, establecida en Brasil desde 1999, firmó acuerdos con diversos actores sociales sindicatos, organizaciones no gubernamentales, instituciones académicas, organismos internacionales y asociaciones del comercio y la industria para desarrollar acciones que apoyen la auditoría y control de los fabricantes.
El objetivo es sumar esfuerzos y promover un amplio compromiso de la sociedad para asegurar las mejores condiciones de trabajo en toda la cadena productiva. Como parte de su compromiso con Brasil, Zara presenta un conjunto de nuevas acciones internas y externas de refuerzo del control de la cadena de producción. Son las siguientes:
– Refuerzo del sistema de auditoría en cooperación con la Confederación Nacional de los Trabajadores de las Industrias del Sector Textil, Vestimenta, Cuero y Calzados, que participará de manera directa en la monitorización de la totalidad de la cadena de producción de Zara en Brasil. Esta iniciativa se enmarca en el acuerdo alcanzado entre Inditex, compañía matriz de Zara, y la Federación Sindical Internacional del Textil a nivel mundial.
– Puesta en marcha de un proceso detallado de verificación para todos los proveedores que quieran trabajar con Zara, que deberán encuadrarse en los requisitos de responsabilidad social corporativa aplicados por la ABVTex (Asociación Brasileña del Comercio Textil), entidad a la que Zara se ha adherido recientemente.
– Elaboración en colaboración con el Instituto Ethos de un Manual de Buenas Prácticas del sector productivo. Este Manual se ofrecerá como referencia a la Asociación Brasileña de la Industria Textil y de Confección para su implantación en el sector textil.
– Establecimiento de un diálogo continuado con la ABIT, organización de empresas de producción textil, con el objetivo de promover medidas que contribuyan a un desarrollo sostenible de este sector. De esta manera se persigue contribuir a su competitividad y su capacidad para generar nuevos empleos.
– Acuerdo con la Asociación Nacional de Inmigrantes Extranjeros en Brasil para identificar posibles focos de precariedad en las comunidades inmigrantes y para desarrollar programas de formación y capacitación dentro de la industria textil que faciliten su inserción laboral.
– Puesta en marcha del número de teléfono gratuito 0800 7709242 para la denuncia de irregularidades supervisado por el Instituto Ethos que comienza a funcionar a partir de hoy. Esta línea, tiene como principal objetivo crear un canal de colaboración ciudadana que permita conocer y solucionar posibles situaciones irregulares en el plazo más inmediato.
Asimismo Zara Brasil expuso ante la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea de Brasilia las medidas que adoptó de forma inmediata al tener conocimiento del incumplimiento del Código de Conducta de Inditex cometido por uno de sus proveedores. Zara suspendió la realización de nuevos pedidos y exigió al proveedor implicado que asumiera las compensaciones económicas fijadas por la ley a los trabajadores afectados, así como las mejoras necesarias para subsanar todas las deficiencias detectadas en los centros de trabajo.
“Queremos agradecer el esfuerzo colectivo de todos los agentes envueltos en este proceso para garantizar unas adecuadas condiciones de trabajo. El compromiso de todas las partes y su corresponsabilidad son el camino más adecuado para alcanzar este objetivo, dijo el presidente de Zara Brasil, Enrique Huerta.
Política de Responsabilidad Social de Zara
Estas medidas se enmarcan en la estrategia de Responsabilidad Social aplicada por Zara en el conjunto de su cadena de producción a nivel mundial. Como prueba de ello, Zara mencionó en la presentación de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de los Diputados las actuaciones llevadas a cabo en diversos países en los que su colaboración con entidades tales como la Federación Sindical Textil Internacional, con quien mantiene un acuerdo de carácter global, le han permitido contribuir a la defensa de los derechos de los trabajadores.
Asimismo, se mencionó la pertenencia de Inditex a plataformas internacionales tales como el Global Compact de las Naciones Unidas, al que se incorporó en 2001, siendo la primera empresa española en unirse a él. Inditex es también miembro desde 2005 de Ethical Trading Initiative, organización que reúne a sindicatos, ONGs y empresas a nivel internacional y cuyo Código, el más exigente del sector, fue incorporado al Código de Conducta de Inditex en julio de 2007.
Como muestra de la solidez de su política de Responsabilidad Social, Inditex fue incorporado al índice Dow Jones Sustainability en 2001, y dos años más tarde a FTSE4Good. Desde entonces se ha mantenido en ellos obteniendo valoraciones crecientes respecto de sus prácticas laborales y en la relación con los proveedores. Finalmente, se ha recordado también la participación de Inditex en el programa Better Work de la OIT, para la implantación de estándares laborales en países en desarrollo, y Better Cotton Initiative, dirigido a la promoción de condiciones de trabajo dignas en las áreas de producción de esta materia prima.
Zara Brasil
Zara está establecida en Brasil desde 1999, cuando abrió su primera tienda en São Paulo, en Shopping Morumbi. La compañía fue incrementando a lo largo de los años su presencia en el país y hoy ya cuenta con 31 tiendas en centros comerciales de diversos Estados (São Paulo, Rio de Janeiro, Paraná, Minas Gerais, Rio Grande do Sul, Pernambuco, Bahia, Santa Catarina, Espírito Santo, Goiás y el Distrito Federal). La empresa cuenta con cerca de 2.000 trabajadores en el país. Además de las tiendas, la empresa tiene en Brasil un centro de distribución desde el que se realiza el envío de los productos a sus tiendas en Brasil y en otros países del continente americano y, desde este año, a Australia y Sudáfrica.
En la actualidad, Brasil es el tercer mercado más importante para Inditex en el continente americano, tras México y Estados Unidos.
El pasado año, la compra por Zara de productos textiles fabricados en Brasil ascendió a cerca de cinco millones de unidades, un 40% de las ventas de sus tiendas en este país. El conjunto de sus proveedores brasileños dan trabajo a más de 7.000 trabajadores.
Grupo Inditex
Inditex, propietario de la cadena Zara y otros siete formatos comerciales, es uno de los mayores grupos de distribución de moda del mundo, con más de 5.200 tiendas en 78 países.
