KWM (Kering Watches Manufacture), ha sido uno de los primeros en participar en la lucha contra el COVID-19, tomando la decisión de cerrar todas sus manufacturas de Le Locle y La Chaux-de-Fonds el 17 de marzo de 2020. La implementación del teletrabajo se ha realizado con éxito, especialmente para los departamentos comerciales, de marketing y recursos humanos con el principal objetivo de reducir los riesgos y garantizar la seguridad de todos sus empleados, proveedores, socios y clientes. Una difícil decisión pero consensuada y aprobada por todos los socios y empleados.
Hoy KWM tiene el placer de anunciar el regreso progresivo a la actividad y la reapertura gradual de las manufacturas de ambas marcas a partir del próximo lunes 27 de abril de 2020, después de seis semanas de suspensión de la producción.
Desde el inicio de la pandemia, tanto Ulysse Nardin como Girard-Perregaux han seguido muy de cerca la evolución de la situación para poder reaccionar y adoptar nuevas medidas siempre que ha sido necesario y así cumplir con las recomendaciones del gobierno. En este contexto, han tomado la decisión de reactivar su producción, y continuar con el teletrabajo todos aquellos departamentos no esenciales para la fabricación de los relojes como son los equipos de marketing, recursos humanos, comerciales y diseñadores. Todos aquellos relojeros y operadores que regresen al trabajo se organizarán en pequeños grupos de máximo treinta y cinco personas con horarios escalonados. El plan de contingencia de vuelta al trabajo comprende reglas estrictas de máxima higiene para todos sus empleados. Entre otras, se incluyen: el uso de geles desinfectantes y mascarillas, lavado de manos cada hora, marcas con indicaciones en el suelo, protección con plexiglás de todas las áreas de recepción, distanciamiento social de dos metros y un máximo dos personas por vestuario.
“Desde 1846 para Ulysse Nardin y 1791 para Girard-Perregaux, en más de 200 años de existencia y habiendo vivido dos guerras mundiales, ninguna de las dos marcas han tenido que cerrar sus puertas. Pero es un orgullo poder decir hoy que hemos podido enfrentar con éxito esta situación, sin precedentes en el mundo y en nuestra industria. La organización en este estado de emergencia ha sido todo un reto, pero estoy orgulloso de observar la agilidad y la pasión que han mostrado todos los equipos en un momento tan incierto y desestabilizador. Piensa rápido, actúa rápido. Plan para el futuro. El nivel de compromiso mostrado por todos los empleados ha sido extremadamente alto durante el período de confinamiento y sé que todos estamos ansiosos por volver al trabajo." – Patrick Pruniaux, CEO de Ulysse Nardin y Girard Perregaux.
“Este ha sido un tiempo muy valioso para redefinir un futuro diferente pero aún mejor, si cabe. Nos enfrentamos al futuro de manera muy positiva y estamos perfectamente preparados para implementar un importante plan de acción. Simplemente necesitamos mantener la calma y ser pacientes hasta que todo haya vuelto a la normalidad.”
We are all “Ulysses” and we have had an Odyssey! Concluye Pruniaux.
Ulysse Nardin es una manufactura vanguardista inspirada en el universo marino que ofrece relojes a los sedientos de libertad.
Fundada en 1846 por Ulysse Nardin y adquirida por el grupo francés de lujo Kering en noviembre de 2014, Ulysse Nardin tiene el mérito de haber escrito algunos de los mejores capítulos de la Alta Relojería. Sus primeros éxitos están vinculados al mundo de la navegación: sus cronómetros de marina son de los más fiables que existen y siguen siendo codiciados por los coleccionistas de todo el mundo. Pionera en la tecnología vanguardista y en el uso innovador de materiales como el silicio, la marca es una de las pocas – con experiencia y maestría in house – en producir sus propios componentes y movimientos de alta precisión. Ulysse Nardin puede presumir de esta excelencia relojera excepcional, formando parte del círculo más prestigioso de la Relojería Suiza, la Fundación de la Alta Relojería. En la actualidad, la marca, a través de sus sedes en Suiza, Le Locle y la Chaux-de-Fonds, sigue su búsqueda de la perfección relojera centrándose en sus cinco colecciones: Marine, Diver, Classico, Executive y Freak. En 2020, Ulysse Nardin explora los Xtremos, inyectando el factor X en el corazón de sus colecciones.