Murano es precisamente el lugar donde se practica el arte venecianode la fabricación del vidrio. Utilizando una técnica particular honrada por el tiempo, los artesanos moldean el vidrio a mano en auténticas varillas de murrina veneciana, que luego se cortan en pequeñas secciones transversales para formar las tradicionales cuentas de vidrio amourrina, caracterizadas por su perfecta y delicada transparencia y su forma única.
Una visión compartida de apoyar la artesanía italiana y celebrar el patrimonio cultural veneciano ha unido a giada forte y elisa evangelisti, culminando en la creación de esta cápsula única, en la que cada cuenta es rigurosamente elaborada a mano por maestros vidrieros venecianos de amourrina. estas pequeñas, pero célebres, gemas de vidrio encapsulan la historia de un arte milenario que aún pervive en la zona de venecia, añadiendo una abrumadora conciencia de pertenencia a la propia comunidad y territorio.
Piezas elaboradas a mano en murano, con amor y paciencia
Todas las joyas de la colección “forte_forte loves amourrina” son elaboradas a mano en murano, con amor y paciencia, por hábiles maestros horneros, tiradores, afiladores y abalorios, que fabrican cada elemento utilizando las mismas técnicas transmitidas de generación en generación.
“Las cuentas amourrina se fabrican con técnicas históricas exclusivas de murano. creemos que mantener vivas estas prácticas es esencial para preservar el patrimonio cultural de murano y proteger sus habilidades locales. la cultura informa nuestro propio ser y conforma nuestra identidad. hacer de la cultura un elemento central de las políticas es la única forma de garantizar que el desarrollo se centre en el ser humano, sea integrador y equitativo. el patrimonio cultural, tanto físico como intelectual, y la creatividad son recursos que deben protegerse y promoverse con la máxima atención y respeto”, explica elisa evangelisti, fundadora de “amourrina”.
Piezas únicas
Cada pieza de joyería, chapada en oro de 18 kt, es única y diferente de las demás, y se presenta en colores exclusivamente diseñados para esta colaboración para formar minúsculos mosaicos, maravillosos micromundos de infinito potencial expresivo rebosantes de colores profundos y vibrantes. una belleza inextricablemente ligada a su fragilidad nos recuerda lo importante que es proteger la diversidad cultural y el talento creativo.
“Me encanta el vidrio”, afirma giada forte. “Es un material que me fascina y que siempre ha formado parte de mi vida. es un material que tiene una gran fuerza y, al mismo tiempo, es frágil y delicado, masculino y femenino. Masculino y femenino. El vidrio puede dar al color un aspecto vibrante, siempre ha inspirado las colecciones de forte_forte porque forma parte de mi infancia: a mi madre siempre le gustaron mucho la cristalería de murano y el vidrio antique, y ella me ha transmitido esta pasión. recuerdo vívidamente los domingos de invierno que pasaba con ella de niña, buscando vidrio en los mercados de antigüedades y en los rincones secretos de venecia y murano”. En 2020, el arte de fabricar cuentas de cristal de murano fue inscrito en la lista del patrimonio cultural inmaterial de la unesco.