Tal y como publicamos el pasado día 14 de abril (ver noticia aquí), la Federación de Industrias del Calzado Español (Fice) y la Asociación Nacional de Comercio de Calzado (ANCC) han vuelto a emitir un comunicado conjunto en el que reiteran su compromiso de trabajar conjuntamente «hacia un horzonte de normalidad» ante la situación crisis sanitaria y económica producida por el coronavirus Covid-19 y proponen a sus respectivos asociados algunas recomendaciones sobre cómo hacer frente conjunto en esta campaña de primavera verano 2020 a los efectos de la crisis sanitaria sobre la compra de calzado.
Entre estas recomendaciones proponen, a sus respectivos asociados, que establezcan entre ellos un diálogo constructivo permanente, pensando en acuerdos mutuamente beneficiosos y evitando malas prácticas comerciales que supongan una fuerte pérdida de valor en el sector. También sugieren que comercios y fabricante piensen en estrategias a 18 meses (tres temporadas) propiciando cierta continuidad en algunos productos. Para lo que insisten también que deberían arbitrarse medidas de liquidez adecuadas a estas circunstancias desde las instituciones públicas.
Finalmente, y también de cara a las administraciones públicas, les solicitan autorizar lo antes posible la apertura progresiva de los comercios de moda siguiendo otras aperturas europeas; impulsar campañas públicas de promoción del consumo de marcas y productos españoles; y la compra en comercios de proximidad sin menoscabar la relevancia de otros canales comerciales. Y, de forma excepcional, también invitan a todos los agentes económicos a acordar con las administraciones una mayor autorregulación en las promociones, descuentos e inicio de las rebajas de verano.
Tanto para la presidenta de la ANCC, Maria Labrador, como del presidente de FICE, José Monzonís, “estas recomendaciones tienen como objetivo mantener ante esta pandemia un sector clave de la moda española; baste con recordar sus niveles de empleo actuales, el servicio personalizado que el pequeño y mediano comercio ofrece a sus clientes, la importancia de este comercio en las tramas urbanas de gran parte de las poblaciones españolas y el prestigio alcanzado por las marcas y productos españoles de una industria constituida por cientos de empresas familiares”.