La Unión Europea reguló las EPR en la Directiva de Residuos de 2018, que introduce requisitos mínimos para que los Estados miembros establezcan EPR, en los sectores y casos que lo consideren adecuado.
El problema es que la mayoría de los EPR actuales se diseñaron para modelos de economía lineal. Fueron aplicados en sectores como embalaje, vehículos, equipos eléctricos y electrónicos. En estos sectores, los EPR obtuvieron cierto apoyo, basado en experiencias positivas en cadenas de valor. Sin embargo, no está probado que las EPR sean la herramienta política adecuada para impulsar la economía circular y una sostenibilidad más amplia en las cadenas de valor textiles. Esto requiere una consideración exhaustiva de los posibles beneficios, límites y consecuencias no deseadas.
Por eso EURATEX recomienda que:
1. El EPR debe diseñarse para apoyar la circularidad
2. El EPR debe valorar diferentes textiles
3. El EPR debe resolver problemas reales
4. No hay contradicciones en los esquemas de EPR para textiles en toda la UE
5. Debe haber acuerdo para un solo concepto de Eco-modulación
6. El esquema de REP no debe tener consecuencias perjudiciales no deseadas.
7. El REP debe permitir la CE mediante la cooperación y la responsabilidad compartida