Con una edición limitada a 88 piezas por modelo, estos exclusivos relojes forman parte de la línea más transgresora de la casa relojera suiza Corum: su inconfundible Bubble, cuya bóveda de 11 mm de cristal de zafiro genera un efecto lupa que permite obtener una singular imagen de la esfera.
En esta ocasión, Bubble rescata el print de camuflaje, una de las tendencias de moda que triunfan temporada tras temporada para ofrecer un accesorio que ofrece infinitas combinaciones, ideal para lucir en looks tanto de día como de noche. Con un espíritu desenfado, el Bubble Camouflage llega para convertirse en el accesorio estrella del invierno.
El Bubble Camouflage, con movimiento automático y una reserva de 42 horas, es resistente al agua hasta 100m y cuenta con acabados superluminova que iluminan las agujas y los números para poder ver la hora en cualquier momento y lugar.
CORUM
En 1955 se fundó la Casa de Corum en La Chaux-de-Fonds (Suiza). Corum tiene el orgullo de contribuir a perpetuar los valores y el buen hacer de la alta relojería. Siguiendo el camino trazado por los fundadores, mantiene su lealtad a las colecciones legendarias sin por ello renunciar a enriquecerlas con un toque de modernidad que lleva el distintivo de la innovación y los avances técnicos. La continuidad y longevidad de sus colecciones no son meras palabras para Corum: el Admiral lleva 50 años surcando los océanos, mientras que la colección Bridges viene dejando huella en la historia de la relojería desde hace más de 30 años. En el año 2000 y haciendo gala de un espíritu transgresor, Corum lanzó Bubble, cuya bóveda de 11 mm de cristal de zafiro genera un efecto lupa que permite obtener una singular imagen de la esfera.