La céntrica tienda de Preciados, 25 se ha convertido por unas horas en un reflejo del universo colorista, urbano y con aires de rave en el que se inspiran las nuevas creaciones de la diseñadora para la marca.
“En mis prendas se mezcla lo naïf con el punk y el techno”, reconoce Escoté. De esa catálisis nace esta nueva colección para Desigual, una invitación a recordar los hits que bailábamos en los clubes a finales de los 90 y los primeros 2000.
El interior de la store se ha acentuado de rosa, uno de los colores estrella de la colección, y ha sido intervenido con decenas de gatitos brillantes y uno hinchable XXL: los felinos son precisamente uno de los motivos más llamativos de uno de los prints de la colección.
Los y las asistentes han podido descubrir cada uno de los diseños, charlar con la propia María Escoté y conocer su inspiración de primera mano. A los platos, Andrea Vandall como DJ y, como sorpresa, la artista Charlotte Allard, colocando ‘tooth gems’ en las sonrisas de los invitados e invitadas.
En la guest list, la actriz Miriam Giovanelli, la DJ Toccororo y la polifacética Amanda Portillo, vistiendo de Desigual x María Escoté. Por el photocall, también desfilaron la cantante Anajú, la artista Caryatides, la modelo Rubí Carrillo y el modelo Miguel Cobos, entre muchos otros.
La colección Desigual x María Escoté está a la venta en exclusiva desde el 24 octubre (en España, excepto Canarias) para usuarios registrados en desigual.com. El 26 de octubre estará disponible worldwide en tiendas seleccionadas y en la web.
La colección, look a look.
“Si hay algo -dice María Escoté- que identifica a nuestra comunidad es la identidad en un lenguaje cromático y gráfico. Es lo que más ilusión me hace, salir a la calle y ver gente con nuestras prendas. Muchas de esas veces esa persona lleva un total look y no es algo que me sorprenda ya que, a la hora de diseñar, yo trabajo así, por lo que mis clientas y clientes entienden a la perfección el concepto de prenda o look que estoy vendiendo”.
Desde esa perspectiva, que Desigual comparte al 100% con la creativa, se ha trabajado conjuntamente una colección de prendas y accesorios -mayoritariamente sostenibles y fruto de procesos más responsables- en la que el color es absolutamente clave. Rojo, morado y verde flúor se combinan con negros rotundos y azules denim en diferentes lavados.
Los estampados son marcadamente gráficos, con rayas, efectos de visión térmica, zooms sobre cuatricromías impresas e incluso un collage con imágenes de gatos. “Es uno de los prints más freaks y arriesgados que hemos hecho”, admite María con entusiasmo.
Una sudadera unisex -temporada a temporada, los fans de esta colaboración se hacen con ellas casi como si de piezas de coleccionista se trataran- y un jersey con fruncidos presentan dichos motivos gatunos. En la campaña, se combinan con jeans, falda y bolso en patch de denim para potenciar la estética Y2K de la propuesta.
Las imágenes, disparadas por Txema Yeste, traducen la estética rave en looks elevados, que son pura moda: porque si los club kids se vestían para el exceso, una it-girl sabe reinterpretar aquellas claves desde una óptica contemporánea. En este conjunto, por ejemplo, un vestido asimétrico de tejido stretch con volantes se combina con un bolso de piel premium de edición limitada y se remata sin reparos con una hoodie unisex oversize.
“El mayor reto de colaborar con Desigual -comenta María sobre, precisamente, las sudaderas- era arriesgar con prendas que en mi marca son hits comerciales, pero aún no lo eran para Desigual. Demostrar que una sudadera, bien trabajada y desarrollada, se puede colocar en los primeros puestos de venta temporada tras temporada y convertirla en una pieza icónica para Desigual ha sido sin duda uno de los mayores retos alcanzados”.
Completan la colección otros diseños llamados a ser los favoritos de muchas esta temporada. Uno de ellos es un vestido mini asimétrico, que combina diferentes paneles de rayas negras sobre colores flúor. En esa misma gama cromática, un jersey de canalé ceñido con trampantojo de corsé. En la campaña, lo hemos coordinado con una minifalda tableada de efecto piel y una cazadora bomber unisex reversible: el anverso es también de efecto piel y el reverso es de peluche verde flúor (haciendo match con el sombrero mullido, una de las piezas más juguetonas de la propuesta).
Los vestidos estampados, seña de identidad de Desigual y uno de los éxitos comerciales de las colecciones Desigual x María Escoté año tras año, se hacen un hueco en la cápsula con una pieza statement: un maxivestido en tejido elástico con un poderoso motivo en tonos morados, rosados y amarillos.
“Saber que muchas personas se sienten empoderadas, guapas, listas o creativas cada vez que usan una de mis prendas -dice María Escoté- no me puede hacer más feliz. Desde el principio he recibido historias de empoderamiento, feminidad, sensualidad… Y muchos mensajes de agradecimiento de personas que pasan por malos momentos y agradecen la felicidad que les dan nuestras prendas. Dar felicidad a una parte de la sociedad es el mayor regalo de nuestra profesión”.
Desigual.
Desigual es una compañía de moda internacional nacida en Barcelona en 1984. Se caracteriza por la singularidad y el carácter único de sus creaciones, pensadas para vestir de positivismo y autenticidad a miles de personas que buscan expresar la mejor versión de sí mismas. En la actualidad, la compañía atraviesa un momento clave para su futuro: una renovación de su imagen, de sus colecciones, de sus espacios… con el objetivo de atraer a una nueva generación de consumidores. Desigual cuenta con más de 2.600 empleados y está presente en 109 países a través de 10 canales de venta, 393 tiendas monomarca y seis categorías de producto: Woman, Man, Kids, Accesories, Shoes y Sport.
María Escoté.
Colorista, rebelde, creativa, apasionada y diferente: María Escoté es una de las diseñadoras españolas con mayor reconocimiento internacional. Artistas como Beyoncé, Rosalía, Rita Ora, Zendaya, Miley Cyrus o Katy Perry han lucido sus prendas, pisando fuerte las alfombras rojas de todo el mundo.
Escoté lleva en sus genes un universo creativo particular: creció entre pinceles y retales, su madre era tejedora y su padre pintor. Lanzó su propia marca en 2006, y hoy su streetwear único y lleno de estilo pop camina por las calles de todo el mundo.