En una resolución histórica que refuerza la protección al consumidor y defiende la integridad de los materiales naturales, el Tribunal Superior Regional de Colonia ha dictaminado que la empresa alemana Mina Merchandising GmbH, propiedad del conocido presentador de televisión Martin Rütter, no podrá seguir comercializando productos sintéticos utilizando el término “cuero de manzana”.
La decisión llega tras una batalla legal iniciada por la Asociación Alemana de la Industria del Cuero (VDL), miembro de la confederación europea COTANCE, que denunció a Mina Merchandising por promocionar collares para perros fabricados con materiales plásticos etiquetados como “cuero de manzana”. La empresa se negó inicialmente a retirar esta denominación, lo que desencadenó el proceso judicial.

El término “cuero” solo puede usarse con productos de origen animal
La corte ha sido tajante: el término “cuero” es exclusivo para productos fabricados total o parcialmente a partir de piel animal. Cualquier otro uso que implique materiales sintéticos o vegetales, sin contenido real de cuero, es considerado engañoso y contrario a la ley. La sentencia revoca así una decisión anterior de un tribunal de primera instancia que había desestimado el caso argumentando que el color azul del producto era suficiente para evitar confusión con cuero auténtico.
El tribunal superior, en cambio, ha subrayado que ningún prefijo como “de manzana”, “de cactus” o “de ruibarbo” justifica la utilización del término “cuero” si el producto no contiene cuero real.
Una victoria contra el «greenwashing» y a favor de la transparencia
Desde COTANCE, su secretario general Gustavo González-Quijano celebró la sentencia como una victoria que va más allá del sector: “Esto no solo es una victoria para la industria del cuero, sino también para los consumidores y para la veracidad en el marketing. No estamos en contra de la innovación, pero sí de las etiquetas que inducen a error y devalúan los materiales naturales”.
En la misma línea, el director general de VDL, Andreas Meyer, recalcó: “No estamos en contra de los nuevos materiales, pero no deben ser llamados cuero si no lo son. Esa es la base del respeto al consumidor”.
La sentencia, que cobra relevancia en un contexto de creciente oferta de materiales alternativos de origen vegetal o sintético, lanza un mensaje contundente a las marcas y empresas de la Unión Europea y del resto del mundo: usar términos como “cuero vegano” o “cuero de manzana” puede violar las leyes de protección al consumidor si se induce a pensar que el producto es natural, auténtico o sostenible cuando no lo es.
Hacia una regulación europea clara
COTANCE ha aplaudido la perseverancia de VDL y ha aprovechado el fallo para reclamar normas claras y homogéneas a nivel europeo que regulen el etiquetado de productos que puedan generar confusión. La sentencia sienta un precedente importante en la lucha contra el greenwashing, una práctica cada vez más extendida que utiliza mensajes medioambientales ambiguos para atraer al consumidor.
La resolución deja claro que aprovecharse de la reputación y calidad del cuero auténtico con fines comerciales es inaceptable, y abre el camino a una mayor transparencia y honestidad en el mercado de productos alternativos.
En opinión de COTANCE, esta sentencia representa no solo una victoria para el sector del cuero tradicional, sino también un triunfo para la transparencia, la honestidad comercial y la defensa del consumidor europeo.















