Tras el satén y las pieles de colores, el joya Joséphine Aigrette es testigo de la introducción de dos nuevos brazaletes. Continuando con su tradición de joyería que indica la hora, Chaumet sacude los códigos relojeros establecidos al dejar de lado cualquier tipo de obstáculo o hebilla y optar en su lugar por brazaletes elegantemente calados que envuelven la muñeca de manera flexible en oro o acero.

Cada uno de los eslabones facetados enfatiza delicadamente el emblemático motivo de la colección en forma de V. Con un sutil trampantojo, resaltan la esfera en forma de pera inspirada en la talla favorita de Joséphine, engastada con piedras preciosas. Aportando un toque de brillo a los movimientos del usuario, estos nuevos relojes Joséphine Aigrette son clásicos ultracontemporáneos para llevar todos los días.