Los matices marrones se combinan con destreza con tonos amarillos, verdes y rojos; ideales para las flores de otoño.
Las cadenas de bolas grandes y monocromáticas también brillan con los jerséis suaves. Al igual que las pulseras anchas, que aportan un toque de estilo.
Querido otoño: ¡ya estamos preparadas para que vengas!















