1. DISEÑO SIN RESIDUOS
O sea, acabar con los desechos: ¿sabías que cerca del 35% de los materiales empleados en el proceso de diseño acaban convirtiéndose en residuos? Por eso mismo, uno de los principios circulares consiste en reducir el material sobrante, lo que implica utilizar novedosos métodos de diseño con los que crear sin que sobre NADA de material. También implica el uso de materiales reciclados en lugar de materiales vírgenes como el poliéster o el nylon, producidos a partir de petróleo y carbón. De este modo se ahorra en los químicos contaminantes que generan esos tejidos. Las prendas sin residuos llevan consigo el uso de procesos de producción con un menor consumo de agua, energía, tierra y/o químicos. Menos residuos = un mundo mejor.
2. VERSATILIDAD Y DURABILIDAD
¡La moda debería ser para siempre! Por eso, otro de los principios de diseño circular es el de crear prendas que sean versátiles y duraderas. La idea es usar materiales que duren para crear prendas como estas, que nos acompañen durante años y años. Nos referimos a camisas reversibles, denim unisex, un vestido que pueda llevarse de cuatro maneras diferentes y vaqueros que incluyan consejos de mantenimiento para que se conserven correctamente. De ahí que las prendas que sigan este principio de diseño estén pensadas para vivir unas cuantas vidas.
3. MATERIALES RECICLADOS Y RECICLABLES
El último de los principios circulares hace referencia al reciclaje, con el fin de reducir la cantidad de tejido que acaba en el vertedero y la necesidad de tejidos nuevos. Ello implica la creación de prendas nuevas a partir de ropa usada (o sea, reciclar prendas antiguas o tejidos sobrantes), empleando monomateriales que se pueden reciclar de inmediato y, cuando se ha utilizado más de un material, diseñando la prenda de manera que esta se pueda desmontar fácilmente (para luego reciclarse). El reciclaje está más de moda que nunca.